Constituyó el punto de inflexión en la campaña de África del Norte , a partir de la cual los Aliados alcanzaron la ventaja definitiva sobre las fuerzas alemanas. Para ese momento las fuerzas del Eje habían sido detenidas por los británicos en El Alamein y el General Bernard Montgomery había tomado el mando del VIII Ejercito Británico en agosto de 1942, sustituyendo al General Claude Auchinleck.
La victoria que las fuerzas aliadas obtuvieron sobre los alemanes acabó con los planes de estos de conquistar Egipto, en aquella época bajo el dominio británico, lo cual le hubiera permitido controlar el Canal de Suez y los campos petroleros del Medio Oriente, lo cual hubiese sido fatal para los Aliados. A partir de este momento, los alemanes tuvieron que retirarse a través de la costa norte de África, bajo el constante acoso de los británicos, los cuales finalmente lograron atrapar a muchos soldados enemigos en Túnez, si bien un importante contingente de fuerzas del Eje lograron huir a Sicilia.
El 23 de octubre Montgomery inició la ofensiva. La líneas alemanas estaban defendidas por los llamados"Jardines del Diablo", a base de campos de minas, alambrados y zonas de fuego cruzado.En El Alamein no había margen para maniobras de envolvimiento; las defensas tenían que ser rotas en forma frontal. El largo de la ofensiva abarcaba 50 kilómetros, en una línea recta que baja desde El-Alamein, en la costa, hacia el sur, donde la cierran las arenas movedizas y prácticamente infranqueables de la depresión de Qattara.
En el momento del ataque, el jefe del Africa Korps, mariscal Erwin Rommel, se reponía de una enfermedad en Austria, por lo cual el peso de la defensa recayó en su segundo, el general Stumme, que poco después moriría de un infarto por las presiones vividas. Una vez superados los "jardines del diablo", las fuerzas aliadas debían enfrentarse a dos divisiones Panzer del Afrika Korps protegidas por una fila de baterías y una cadena defensiva a cargo de las divisiones Brescia, Trento, Pavia y Bologna.
Rommel
La ventaja aliada en carros de combate era de 1230 unidades contra apenas 548 de las fuerzas del Eje y encima las divisiones italianas contaban con tanques ligeros CV, más conocidos como latas de sardina por su fragilidad. La sorpresa del ataque fue total y se cobró enseguida la vida del general Stumme, a cargo de la defensa en ausencia de Rommel, quien fallece de un ataque cardíaco tras inspeccionar las líneas del frente, el día 24 de octubre. Antes de morir, el desafortunado general alcanzó a telefonear a Berlín para pedir el inmediato regreso de Rommel. Este último aún se encontraba convaleciente pero igualmente decidió volver a Africa para guiar a sus hombres que por aquellas horas se derrumbaban ante el incontenible avance de Montgomery.
Desarrollo de la batalla
La situación que encuentra Rommel en Africa es dramática, con las vías de comunicación sometidas a intensos bombardeos y con escasez crítica de combustible, municiones y víveres. Entre la RAF y la USAAF(fuerza aérea norteamericana) lograron hundir el 66 % de los suministros de combustible provenientes de Italia, a través de las bases aéreas de la isla de Malta, en el Mediterráneo, la misma isla que Mussolini increíblemente no ocupó en junio de 1940.
Las bajas Aliadas fueron de 24.000 Por su parte el eje perdio 13.500 soldados. La batalla del Alamein representó la primera victoria de los aliados en tierra durante la segunda guerra mundial y la expulsion definitiva de las fuerzas del eje de Africa.
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